domingo, 4 de diciembre de 2011

Es un Tablet, no es un Teléfono No, es Míooo!!

Nunca me gustaron los tablets (o tabletas), siempre me han parecido fruto de una necesidad no real producida por el mercado.

Son lo suficientemente grandes para ser incómodos pero justo con un tamaño que no permiten disfrutar de espacio ni una buena sensación a la hora de hacer uso de ellos. Sin tinta electrónica leer es no es del todo aconsejable. En su mayor parte sin teclado físico... vamos lo que es un marco de fotos grande para que te gastes el dinero y el tiempo en sus chorro-apps. Sin la versatilidad ni la funcionalidad de un ordenador, se queda muy corto para lo que una persona necesita.

Como ya decía, nunca me gustaron los tablets y con los nuevos teléfonos o teléfonos inteligentes, siempre me ha pasado algo parecido, me falta pantalla por todos lados. Me veo ahogado en un mar de funcionalidad concentrado. Pero no hace mucho escuché un dispositivo que cambiaría mí modo de ver los Tablets y los dispositivos móviles. Ya que tiene lo bueno de un mundo y lo bueno del otro. El Samsung Galaxy Note.

Háblale a tú Android

Últimamente mis amigos piensan que me he vuelto loco, que he dado un paso más allá. No se extrañan tanto desde que me vieron por primera vez hablar con el manos libres, porque sí, ahora le hablo a mí teléfono y este me entiende.

Escribo los emails mucho más rápido que con el ordenador y este artículo tras una edición de puntos, comas y alguna que otra errata está hecho con el servicio de Speech to Text de Android (Voice Recognition).